¿Por qué se usa helio en cromatografía de gases?

El helio es un gas de opción común en cromatografía de gases por sus propiedades físicas y químicas únicas que proporcionarn un análisis de calidad y resultados optimos. Se utiliza para transportar las diferentes sustancias disueltas en el gas hacia el detector por su gran eficiencia en esta técnica.

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Los motivos del amplio uso del helio en cromatografía de gases son:

Baja densidad: El helio es más ligero que el aire, lo que permite una mejor resolución de las separaciones cromatográficas.
Buena resolución: El helio tiene un alto poder de carga y una baja viscosidad. Esto le permite transportar los elementos a través de la columna cromatográfica más rápido que otros gases portadores como el nitrógeno, y se consigue una resolución alta y rápida de los compuestos.
Baja polaridad: El helio se considera un gas apolar, lo que significa que no interactúa fuertemente con los compuestos disueltos en el gas. Esto puede mejorar la selectividad y resolución de las separaciones cromatográficas.
Interacción débil con las fases estacionarias: El helio tiene una interacción débil con las fases estacionarias utilizadas en cromatografía, lo que hace que el rendimiento y la estabilidad de la columna cromatográfica sean mejores.
Facilidad de uso: El helio es un gas inerte que no reacciona con los compuestos disueltos en el gas, lo que facilita su uso en cromatografía.
No inflamable: El helio no es inflamable y, por esta razón, ofrece un uso más seguro en condiciones analíticas de laboratorio.
Punto de ebullición muy bajo en comparación con otras moléculas: El helio no es condensable en toda la gama de aplicaciones técnicas. Esto se debe a que permanece como gas a temperaturas muy bajas, lo que lo hace útil en análisis a temperaturas muy bajas.

Gracias a sus propiedades, el helio es, junto con el nitrógeno, el hidrógeno, el argón y el aire, uno de los gases puros más utilizados en los laboratorios para aplicaciones de química analítica.
Es particularmente efectivo en cromatografía de gases para detección y separacíon de componentes de una muestra que son poco solubles en solventes orgánicos y que no pueden separarse por cromatografía líquida. Además, se utiliza en otros tipos de análisis, como la ionización de moléculas en fase gaseosa y análisis espectroscópicos.

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